Cuenta la leyenda que hace muchos,muchos siglos, en un lugar muy frío había un monasterio.
Ahí vivían los monjes encargados de preservar la paz en el mundo; ese monasterio era cuidado por leones mágicos.
Año con año los leones bajaban al pueblo para poder comer y seguir cuidando el monasterio de cualquier peligro que lo acechara.
Los aldeanos colocaban en la parte superior de la puerta de sus viviendas una ofrenda,con frutas y verduras para los animales.
Si el león aceptaba comer la ofrenda, esa familia tendría la protección de los Dioses durante todo el año, habría abundancia y prosperidad para todos los miembros.
Los leones danzaban toda la noche en agradecimiento por la abundante comida que les era ofrecida, durante todo el festejo los monjes tocaban los tambores y los platillos para recordarles el camino de vuelta.
Al alba, el monasterio se iluminaba con fuegos artificiales para que los leones regresaran a su puerta, a reiniciar la guardia permanente.
Y asi, año tras año, los leones regresaron al pueblo hasta que hubo que mudarse de aldea y cuidar el monasterio desde otra dimensión.
Los leones del Tibet..., unicornios, pegasos, nahuales, dragones y tantas otras criaturas mitológicas de las que hemos oido hablar...
ResponderEliminarLo que me recuerda que por allá, hace algunos años, en mi niñez, alguien me contesto a la inocente pregunta...
-¿En dónde viven ahora esas bellas criaturas mágicas?
Como se lo pregunté a alguien relacionado con la iglesia católica, esta fue su respuesta:
-Hace muchos años, cuando Dios se dió cuenta de la maldad del ser humano, mando a un hombre justo a construir una gran arca para poder preservar la vida del planeta, pero este hombre al percatarse que no cabía una pareja de todos los organismos de la Tierra, decidió construir varias... y salvar a varios hombres también...
Al llegra el día señalado, las aguas del cielo inundaron la superficie de la Tierra durante mucho tiempo y los fuertes vientos dispersaron las arcas; al volver la calma meses después, las arcas llegaron a tierra firme, muy distantes una de la otra...
Una, a lo que hoy llamamos Europa, otra a la región de África, Asia, Australia y América... por eso es que los animales son tan diferentes en esos continentes.
-¿Pero en esos lugares no ¿existen dragones ni unicornios, ni pegasos, ni...?
-No, efectivamente, esos bellos animales no viven en ningún lugar conocido, porque el arca que los llevava se perdió en el inmenso oceáno de la imaginación y no ha tocado tierra, y solo si cierras los ojos podras descubrirlos, volando y galopando en un campo verde, soleado, al lado de un gran arcoiris...
-y ahora yo añadiria... y también los oiras al bajar de las montañas para recoger las ofrendas que dejas delante de tu corazón en una noche estrellada... y ellos volando y rugiendo llegarán para llevarse tus dolores y tus penas, para que se disuelvan con la diáfana luz del sol en de otra dimensión y tu puedas seguir andando el largo camino que nos resta por seguir...
OIA